Amistades positivas
La amistad al igual que el
amor tiene muchas caras, pero ninguna de ellas es tan reconfortante como la
visita de un amigo en los momentos difíciles. Todos sabemos que la verdadera
amistad se demuestra en la enfermedad, la tragedia y la partida de uno de
nosotros. Un buen amigo siempre será aquel que esta con nosotros en las buenas
y en las malas para el enfermo convaleciente y su familia, la presencia de un
amigo resulta invaluable. Pocos entienden por que, pero al acudir y alentar a
que se recupere y al brindar su ayuda, el amigo participa en la recuperación. Dicha
acción solo la realizan los amigos verdaderos, los amigos de siempre.
La amistad es una de las
relaciones interpersonales más comunes que la mayoría de los seres humanos
tiene en la vida, la cual se da en distintas etapas de la vida y en diferentes
grados de importancia y trascendencia. Nace cuando los sujetos de la amistad se
relacionan entre si y encuentran en sus seres algo en común. Hay amistades que
nacen a los pocos minutos de relacionarse y otras que tardan años en hacerlo,
otras que duran unas horas y otras que son para toda la vida. Entre los
componentes de la amistad están el agrado por compartir una o más actividades
ideas, gustos, recuerdos o la vida misma, la confianza y la sinceridad, interés
o preocupación por el amigo, la comprensión y el respeto. La amistad se basa no
solo en las similitudes que existan entre los individuos si no en aprender a
respetar las diferencias.
Las amistades positivas son aquellas que están en las buenas y en las malas cuando uno los necesita es aquel que no te induce a las drogas al alcohol y al cigarro nos da buenos consejos, no se fija en lo que tienes y te quieren tal y como eres. Esta contigo desinteresadamente.
jairo y jose antonio**